Los políticos mentirosos son una amenaza para la democracia y el bienestar social. Pero, ¿cómo podemos identificarlos y evitar que nos engañen? Existen algunas señales que nos pueden ayudar a detectar a un político mentiroso, tanto en su lenguaje verbal como en su lenguaje no verbal. A continuación, presentamos algunas de ellas:
- Lenguaje verbal: Un político mentiroso suele usar frases vagas, ambiguas o evasivas, que no comprometen su responsabilidad ni ofrecen datos concretos. También puede recurrir a eufemismos, negaciones o falsas promesas, para ocultar o distorsionar la realidad. Además, un político mentiroso suele repetir mucho las mismas palabras o frases, para reforzar su mensaje y convencer al público.
- Lenguaje no verbal: Un político mentiroso suele mostrar signos de nerviosismo o incomodidad, como tocarse la cara, el cabello o la ropa, mirar hacia otro lado o evitar el contacto visual, moverse mucho o encogerse de hombros. También puede mostrar signos de arrogancia o desprecio, como levantar la barbilla, fruncir el ceño o sonreír con sarcasmo. Además, un político mentiroso suele tener una expresión facial o corporal que no coincide con lo que dice, lo que se llama incongruencia emocional.
Estas son algunas de las señales que nos pueden ayudar a detectar a un político mentiroso, pero no son infalibles ni definitivas. Es importante contrastar la información que nos ofrecen los políticos con otras fuentes fiables y verificables, y ejercer nuestro sentido crítico y nuestra responsabilidad ciudadana.